25/02/19

La Organización Mundial de la Salud (OMS) alertó recientemente sobre la importancia de las vacunas para prevenir enfermedades como el sarampión, cuyas cifras mostraron a partir de 2018 un fuerte repunte en todas las regiones del mundo. En 2017 se registraron 170 mil casos, mientras que en 2018, 229 mil, de acuerdo con el organismo internacional.

En un comunicado, la OMS explicó que no es un problema aislado, ya que hay brotes «extensos y crecientes en todas la regiones». Particularmente preocupan casos como Ucrania, Madagascar, República Democrática del Congo, Chad y Sierra Leona, lugares donde se encontraron epidemias.

En Europa se registraron unos 83 mil casos en 2018, entre ellos 53 mil en Ucrania.

La OMS lamenta el aumento de casos de sarampión pese a que se cuentan con los avances médicos para combatirlo. En algunos casos los niños que no son vacunados son los más pobres, los que viven en comunidades marginadas, pueden ser niños refugiados o migrantes. Mientras que en los países ricos el inconveniente es que se difunde información falsa que desalienta a los padres a vacunar a sus hijos.

El sarampión provoca encefalitis, neumonía, pérdida de visión e incluso puede llevar a la muerte a bebés y niños que sufren desnutrición y que, por tanto, tienen un sistema inmunológico debilitado. El virus se transmite por aire y es muy contagioso. Por cada caso que ocurra, en un ambiente donde la gente no esté vacunada, se dan entre 9 y 10 contagios, señaló el organismo.

«Estamos retrocediendo en los progresos que se hicieron. Y no retrocedemos porque no tengamos las herramientas. Tenemos las herramientas para prevenir el sarampión. Estamos retrocediendo por el fracaso en la aplicación de las vacunas», explicó la directora de inmunización de la OMS, Katherine O’Brien.

Fuente: OMS

Crédito de foto: eldia.es