Las meditaciones y dibujos de varios niños y jóvenes, de entre 3 y 19 años, marcarán el Vía Crucis 2021 en la Plaza de San Pedro el 2 de abril, Viernes Santo. El papa Francisco presidirá la celebración a las 21 horas (hora local de Italia), y la misma será transmitida en directo por Vatican Media para todas las emisoras conectadas, y a través de sus canales de YouTube, su portal de Facebook y su página www.vaticannews.va.
El Sucesor de san Pedro guiará los pasos de Jesucristo en su camino a la crucifixión en el Gólgota, que será interpretado y revivido por el Grupo Scout Agesci “Foligno I” (Umbría) y la parroquia Romana de Santi Martiri di Uganda, para las meditaciones, mientras que los jóvenes huéspedes de la Casa Familiar “Mater Divini Amoris” y la Casa Familia “Tetto Casal Fattoria” han realizado los dibujos.
Paula Darder, de 25 años, proviene de Mallorca, España, se encuentra desde setiembre cumpliendo servicios de voluntariado en la Casa Familia “Tetto Casal Fattoria”, una de las dos casas que ha realizado los dibujos que acompañarán la noche del Viernes Santo.
Tal como ella misma nos explica, la Cooperativa “Tetto Casal Fattoria” trabaja desde 1984 con jóvenes y menores en riesgo de exclusión social, y, concretamente, gestiona los procesos de acogida con características educativas. Gracias a la pasión de los voluntarios, la dedicación de los educadores, el entusiasmo de los menores y la valiosa ayuda de las personas que sostienen económicamente, a lo largo de los años, el “Tetto”, como ella le llama, se ha convertido en una realidad cada vez más sólida. Hoy, en las cinco casas familia y en los apartamentos del proyecto de la autonomía acompañada, se acogen y apoyan a casi 100 menores y jóvenes que vienen de realidades familiares y sociales difíciles.
La participación de los niños del Tetto en el Vía Crucis del papa Francisco –cuenta Paula– comenzó con una historia: una historia dividida en 14 etapas. Un viaje en el que aprendemos del sufrimiento de las caídas y la soledad, de las injusticias y el abandono. Pero también, y, sobre todo, de la amistad, del amor y la esperanza.
Los niños, jóvenes y mayores, italianos y extranjeros, católicos y no católicos, han escuchado, entendido e interpretado, y a través de colores han querido representar aquello que más les ha impactado. Sus dibujos cuentan la historia de la Pasión de Jesús, pero entre esas láminas de colores también encuentran sus propias historias. Historias que han recorrido un camino difícil, soportando dolores y sufrimientos, y que no ha sido nada fácil de sobrellevar.
La joven voluntaria explica que en las Casas Familia “Tetto Casal Fattoria” los menores encuentran “amistad y apoyo, experimentan la alegría de caminar juntos y el alivio de compartir el esfuerzo por construir un futuro en paz”, y es con “gran entusiasmo y mucha emoción”, que los jóvenes, pero también los mayores, se preparan para vivir la celebración de la Pascua y afrontar este camino en San Pedro junto al papa Francisco.
Crédito de la nota: Vatican News.
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