Ya llevo largos años por Latinoamérica. 12 años en Colombia, 25 años en Paraguay y ahora 11 en Bolivia. Es un regalo muy grande del Señor sentirme enviada por Él y poder compartir mi vida con tantos hermanos, hermanas, aprender de tantas y tan ricas culturas, todo un privilegio de mi Dios al que agradezco cada día.
En este momento vivo en Cochabamba con tres hermanas más, dos chilenas y otra española, Montserrat. Animamos un centro socioeducativo en la Zona Sur de Cochabamba, con niños y jóvenes en riesgo, y otro proyecto con madres que tienen hijos con alguna discapacidad. Es una hermosa misión y nuestro deseo es poder acompañar a niños, niñas, jóvenes y familias desde una educación integral, liberadora, que inculque los valores evangélicos.
El equipo que lleva adelante esta hermosa misión son personas muy entregadas y comprometidas. No somos muchos pero, poniendo alma y corazón, Dios nos ha bendecido con frutos hermosos, jóvenes ya de 18 años que empezaron con 8 añitos, líderes, solidarios, comprometidos y capaces de saber decir no a ofertas de drogas, pandillas y demás cosas que rondan por la zona y, lo más hermoso, capaces de soñar una vida mejor…
Sigo en contacto con la Delegación de Misiones de Albacete, y siempre que visito a la familia tenemos algún encuentro con ellos. También nos acompañan en la distancia. Muchas gracias a todos. Desde Bolivia mi agradecimiento por vuestro recuerdo y acompañamiento. Que Jesús resucitado nos siga llenando de su entusiasmo por el Reino.
Crédito de la nota: OMPRESS.
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