“Aunque la pandemia sigue afectando a muchos países, ha sido y es una oportunidad para redescubrir la utilidad de las redes sociales y un impulso para usarlas más y mejor para la animación, la formación, la información y la cooperación espiritual y material.
A través de los medios de comunicación podemos llegar a más personas, especialmente a aquellas que quizá nunca hubiésemos conocido. Además, se ha producido una mayor implicación de las familias y la participación de los padres en los compromisos misioneros de sus hijos.
Si bien es evidente la practicidad de estos medios, la visita en persona a las parroquias y escuelas y la labor de animación directa, ‘en presencia’ sigue siendo insustituible”: Así lo explica la hermana Roberta Tremarelli, AMSS, Secretaria General de la Obra Pontificia de la Santa Infancia (POSI) hablando sobre la realidad de la Obra Pontificia (también llamada “Infancia Misionera”), a la luz de los recientes encuentros continentales, celebrados en línea.
Ésta es una de las cuatro Obras Misionales Pontificias (OMP) – explica la hermana Tremarelli -, “es diferente en cada continente pero incluso donde se organiza con grupos, en los que los niños se hacen miembros a través de una ceremonia de compromiso, se sigue proponiendo a todos los niños y jóvenes la espiritualidad y el carisma, precisamente para ser inclusivos”.
Cabe destacar que, en Malawi, por ejemplo, la Dirección Nacional de las OMP ha recibido el encargo de la Conferencia Episcopal de ocuparse de la catequesis con niños y jóvenes, por lo que durante este tiempo de reclusión se han realizado varias emisiones radiofónicas de catequesis.
La Dirección Nacional en Francia también realiza breves transmisiones radiofónicas semanales tituladas “Les petits curieux de la foi” (Los pequeños curiosos de la fe) en las que se presenta cada vez un tema de la fe y es explicado por los niños.
El confinamiento provocado por la pandemia ha penalizado mucho a las direcciones nacionales de las Obras Misionales Pontificias, que habitualmente trabajan con las escuelas para la propuesta de la Infancia Misionera: pero algunas han conseguido proponer iniciativas, sobre todo de oración, para implicar a los niños y jóvenes misioneros.
Por ejemplo, en Malta se han promovido varias iniciativas a través de Internet para acompañar a los niños y jóvenes que se ven obligados a quedarse en casa. “Al no poder reunirnos con ellos, se envió por correo electrónico material que cada niño podía elaborar en su casa, implicando así también al resto de la familia, para ayudar a construir una Iglesia en casa”, informa la Secretaria General.
Fuente: Agencia Fides.
Más historias
Expresa el Papa su tristeza por los niños en la guerra; pide alto al fuego
«En Navidad tengan una mirada para los que sufren»: Francisco
Francisco a los jóvenes: no a los trabajos humillantes, tengan sueños y metas