El Santo Padre recibió esta mañana en audiencia a treinta y tres monjes budistas de las escuelas Theravada y Mahayana, junto a sesenta budistas laicos y a varios representantes de la Iglesia católica en Tailandia con motivo del 50º aniversario del histórico encuentro del 17º patriarca supremo budista de esta nación con el papa Pablo VI, del 5 de junio de 1972.
Superar el egoísmo que genera conflictos y violencia
«En un momento en el que la familia humana y el planeta se enfrentan a múltiples amenazas, el diálogo amistoso y la estrecha cooperación son aún más necesarios. Lamentablemente, de todas partes se oye el grito de una humanidad herida y de una Tierra desgarrada. Buda y Jesús comprendieron la necesidad de superar el egoísmo que genera conflictos y violencia».
«Evitar el mal, cultivar el bien y purificar la propia mente», decía Buda, mientras Jesús enseñaba a sus discípulos: «Les doy un mandamiento nuevo: que se amen los unos a los otros. Como yo los he amado, ámense también los unos a los otros».
Así lo recordó Francisco en su saludo a esta delegación budista de Tailandia acompañada por varios representantes de la Iglesia católica en esta nación.
«Profundizar el diálogo y la cooperación en el camino de la fraternidad»
Todos somos hermanos y hermanas. El Pontífice subrayó que, en el mundo actual, la tarea de los cristianos y los budistas es guiar «a sus respectivos fieles hacia un sentido más vivo de la verdad de que todos somos hermanos y hermanas».
«Esto implica que debemos trabajar juntos para cultivar la compasión y la hospitalidad hacia todos los seres humanos, especialmente los pobres y marginados. Con este espíritu, aliento sus esfuerzos para profundizar y ampliar el diálogo y la colaboración con la Iglesia católica».
Colaboración entre el Vaticano y los budistas tailandeses
A propósito del 50º aniversario del encuentro de Somdej Phra Wannarat, 17º patriarca supremo budista de Tailandia con Pablo VI, el Papa les agradeció esta visita que renueva los lazos de amistad y colaboración mutua.
Francisco mencionó asimismo la visita de la delegación tailandesa hace cuatro años y la acogida y hospitalidad recibida en Tailandia durante su viaje apostólico del año 2019. A continuación, agradeció la «amistad y el diálogo fraternal» de los budistas con los miembros del Dicasterio para el Diálogo interreligioso y con la comunidad católica en Tailandia y, por último, invocó la abundancia de bendiciones celestiales para todo el país y sus habitantes.
Crédito de la nota: Vatican News.
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